Juan Saenz (@LorenzoLocal)
En el marco de la primera fecha de la Eurocopa 2021, Portugal y Hungría abrieron el “Grupo de la Muerte”. El combinado luso, uno de los candidatos a quedarse con la corona, cumplió con los deberes y, si bien no fue para nada fácil, derrotó de forma amplia al cuadro húngaro. En el Puskás Aréna de Budapest, fue 3-0 con goles de Raphaël Guerreiro y Cristiano Ronaldo, en dos ocasiones. De esta manera, el seleccionado portugués, último campeón del torneo continental en la edición 2016, se acomoda momentáneamente como líder del Grupo F. Los dos equipos restantes, Alemania y Francia, se ven las caras desde las 16hs en el Allianz Arena, en un enfrentamiento que promete y mucho.
1-Victoria costosa: en varios momentos, los futbolistas de Portugal se encontraron escasos de ideas cuando tuvieron la pelota, sin poder entrar y romper con la muralla que propuso el rival. Además, sobretodo en la primera mitad, los atacantes, los más creativos del equipo, se notaron imprecisos y poco participativos. Para el actual defensor del título, no fue fácil superar a este combativo y duro Hungría, pero ese tanto conseguido en el epílogo del duelo, mediante una jugada con algunos desvíos, desató en una goleada. Por como se dio el cotejo, el 3-0 termina siendo un resultado abultado, más allá de que, sin brillar, los lusos merecieron claramente quedarse con el triunfo. Que por cierto, será fundamental para la clasificación a la siguiente ronda. Siempre es positivo arrancar ganando, y así lo hicieron los comandados por Fernando Santos.
2-Perdió el orden y lo pagó caro: el equipo de Marco Rossi, teniendo al lado un rival de tal jerarquía y siendo el más débil del grupo, prefirió apostar a poblar el mediocampo para impedir el pasaje de Portugal, lo cual pudo sostener, con orden, hasta el último cuarto de la tarde. Los húngaros hicieron un gran esfuerzo defensivo, aguardaron en su propio terreno, esperando a que se presente alguna oportunidad para salir rápido y contraatacar. El planteo del DT italiano funcionó, y hasta pudieron generar peligro en el arco defendido por Ruí Patricio, pero se vio opacado por esa falta de atención y desorden sobre el final. Incluso, a los 79 minutos, Szabolcs Schön, ingresado en el complemento, había sorprendido y puesto en ventaja al conjunto húngaro. Sin embargo, para la tranquilidad de algunos y el lamento de otros, el delirio duró pocos segundos, debido a que el gol fue anulado rápidamente por el asistente de línea, por un claro offside. Su referente adelante y capitán, Ádám Szalai, peleó todas y se encontró muy solitario. También cabe destacar la gran actuación del arquero Péter Gulácsi, que respondió muy bien cuando fue exigido, pero luego vino la caída de su arco.

3-Una ráfaga de goles que cambiaron la historia: transcurriéndose 84 minutos de juego, Portugal no podía concretar sus situaciones ofensivas. Hasta que, en los pies de Raphaël Guerreiro ayudado por un desvío en un defensor del rival, logró quebrar la igualdad y allí hubo un giro rotundo en el desenlace del encuentro. Los lusos se aprovecharon de una Hungría desconcertada, golpeada y sin ánimo, luego de aguantar el arco en cero durante gran parte, y ahí fue cuando vinieron los aciertos, de la mano del goleador: Cristiano Ronaldo, el primero de penal a los 87 minutos, tras una infracción dentro del área sobre Rafa Silva. Después, en el segundo gambeteó al arquero a los 92 minutos para poner cifras definitivas. Con los dos tantos, el “Bicho” selló una goleada de Portugal, que tuvo complicaciones ante un rival de menor nivel.
4-Cristiano Ronaldo, el hombre récord: el astro de la Juventus no había conectado mucho en el partido, sin intervenciones importantes, pero finalizó siendo determinante para la victoria, por lo que fue una de la figuras del cruce. Desde los doce pasos y después eludiendo al arquero, metió dos goles que lo convierten en el máximo artillero en toda la historia de este certamen. A su vez, alcanzó los 106 tantos con la camiseta de su selección.
5-La gente copó el estadio: el partido tuvo un condimento muy especial, ya que contó con un ambiente sensacional: el escenario estuvo repleto de público. Con casi 70.000 espectadores presentes, entre húngaros y portugueses, es la única sede de la competencia que llenará el 100% de su capacidad. Desde el inicio de la pandemia, es la primera vez en Europa que un evento futbolístico de tal magnitud cuenta con la totalidad de las gradas llenas.
Foto destacada: UEFA