Nicolás González (@NicolasGonzF)
Por el partido correspondiente a la Fecha 28 de la Bundesliga 2019/20, Werder Bremen y Borussia Mönchengladbach repartieron puntos en el Weserstadion tras haber igualado sin goles en un encuentro con ciertos roles invertidos. Esta paridad deja mejor parado al conjunto local ya que sigue sumando unidades y espera por el resultado de Fortuna Dusseldorf, mientras que la visita se metió en zona de Champions League debido a la caída de Bayer Leverkusen.
Foto: promiedos.com.ar |
1-Milot Rashica y Davy Klaasen: A pesar de que no se hicieron presentes los goles en este encuentro, el delantero de Kosovo fue una de las figuras. En una jornada que “Die Werderaner“ (“Los Isleños del Rio”) mostraron una imagen diferente a comparación de partidos anteriores, el delantero contó con tres situaciones concretas de gol. Justamente, este se asoció en ofensiva con el neerlandés, que tuvo la gran tarea de ser el generador de juego en la zona ofensiva. Pese a contar con una menor posesión que su rival, fue más incisivo y tuvo más oportunidades de romper el cero.
2-Yann Sommer: La actuación del arquero suizo es para destacar, siendo uno de los grandes intérpretes de este 0-0. Los números del cotejo arrojan que los locales tuvieron siete chances efectivas de gol y gran parte de ellas fueron impedidas por el propio Sommer. Conciso al momento de salir del arco, muy seguro al momento de recibir los remates y pese a que contó con alguna mala salida con los pies, salvó a su equipo en más de una ocasión, entre las más destacadas, un remate a Devie Selke sobre el final del partido.
3-Roles invertidos: A priori, las posiciones de ambos en la tabla de posiciones y los últimos resultados vaticinaban que podía darse un encuentro con grandes diferencias. Sin embargo, sucedió lo contrario. Werder Bremen, que pelea por mantener la categoría, ejecutó un gran plan de juego, sometiendo a su oponente en algunos tramos del encuentro y mostrando una apariencia más ofensiva. Mientras que Borussia Mönchengladbach fue un equipo muy forzado, donde nunca aparecieron pases filtrados para romper las líneas defensivas y se aferró más que nada a la jerarquía individual, que no hizo peso y no tuvo esos ataques constantes que lo caracterizaban en jornadas anteriores.
4-Tácticas abocadas al mediocampo: El resultado que se dio en Weserstadion es un reflejo de lo luchado que fue este encuentro. El local salió al campo de juego con un 4-3-3, pero al momento de no contar con la tenencia de pelota, este sistema se transformó en un 4-5-1 en el cual los delanteros retrocedían para cortar el circuito de juego en la mitad de la cancha. Con la conformación de esta idea, no ejercieron la presión alta sino que esperaron en zona de tres cuartos para aplicar la tensión en esa zona. En cuanto a su rival, “Die Fohlen” (“Los Potros”) figuraron con un 3-4-3, pero este se iba modificando a un 3-4-2-1 y el retroceso que se realizaba hacia atrás, se iba alternando entre Marcus Thuram y Alassane Pléa, que se repartían el frente de ataque.
5-La ineficacia de Marcus Thuram y Alassane Pléa: La ausencia de Breel Embolo quizás pudo ser una causa de estas actuaciones que quedarán para el olvido. Ante la no presencia del tridente, los delanteros franceses fueron los encargados de la definición en el ataque. Sumado a la carencia de llegadas, estos nunca hicieron pesar su jerarquía y prácticamente no pudieron incomodar a la defensa rival. Si bien ayudaron en cuanto a las tareas defensivas, no gravitaron en ofensiva y no generaron ningún tipo de peligro.
Resumen del partido
Ficha técnica
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