Augusto Demattei
La “Scaloneta” ya se entrenó en suelo asiático y lo hizo con muchos flashes.
15.000 personas eufóricas. Mucho revuelo. Aplausos y gritos. Los flashes apuntando principalmente a Lionel Messi. Ayer, en ese contexto se entrenó en Abu Dhabi la Selección Argentina. Fue en el estadio Al Nahayn y un lujo para los flamantes espectadores, que pagaron entrada.
Los futbolistas, comandados por Lionel Scaloni, corrieron, realizaron pases y driles y finalmente practicaron movimientos tácticos. El DT sabe que no hay tiempo que perder. Mañana será el último amistoso y ya en menos de una semana será el tan esperado debut.
La gran noticia fue que Cristian Romero pudo entrenarse sin problemas. El jugador había sufrido una distensión del gemelo derecho pero ya está recuperado. En contraste, Nicolás Tagliafico entrenó diferenciado aunque solo por precaución: el lateral acumulaba el desgaste del viaje en sí y el de su último partido con su club, en el que jugó los 90 minutos.
Scaloni paró un equipo con los jugadores que disponía. Cabe aclarar que no todos habían llegado para ese entonces. En defensa puso a Foyth, Romero, Pezzella y Molina. En el medio, De Paul, Paredes y Palacios. Arriba puso a Di Maria, Álvarez y Messi.
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